La persistente crisis energética en Paraguay profundiza las tensiones entre consumidores, sector empresarial y autoridades. Mientras los cortes de energía afectan a la vida diaria y al tejido productivo del país. Los gremios empresariales del país se alzan exigiendo soluciones inmediatas y a mediano plazo, con inversiones que acompañen el real crecimiento de la demanda.
Por varios días consecutivos y en varios puntos del país, se sufrieron de forma simultánea cortes en el suministro eléctrico, las quejas se exacerbaron por temperaturas que alcanzaron una sensación térmica de 50 °C. La problemática no sólo impacta a los hogares, con daños en electrodomésticos, sino también al sector industrial y de servicios, que ven interrumpidos sus procesos de producción y enfrentan pérdidas económicas significativas.
Profunda preocupación de gremios
La Cámara Paraguaya de Supermercados (CAPASU) y la Unión Industrial Paraguaya (UIP) expresaron su “profunda preocupación” ante los recurrentes cortes y fluctuaciones en el suministro eléctrico. Resaltan que los USD 300 millones anuales destinados a la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) para infraestructura son insuficientes ante la creciente demanda energética de Paraguay. “Nos encontramos pagando las consecuencias de decisiones políticas erróneas tomadas años atrás”, señala el comunicado de la UIP, instando a aumentar las inversiones.
En respuesta a la crisis, sectores políticos representados en el Congreso han iniciado acciones: los oficialistas buscan dialogar con el presidente de la ANDE para encontrar soluciones, mientras que el bloque opositor contempla la interpelación del Ing. Félix Sosa, presidente de la entidad.
El presidente Santiago Peña dijo reconocer la insatisfacción con el servicio y asegura que se trabajará en revertir la situación mediante una mayor inversión en el sector eléctrico. “Hay que seguir invirtiendo, la ANDE hoy tiene en ejecución 1.000 millones de dólares en contratos”. Además, mencionó que en los últimos 4 o 5 meses, la demanda “ha aumentado casi el tamaño de una turbina de Itaipú”.
Causas de la crisis
Desde la ANDE, el Ing. Félix Sosa detalló que las causas de la crisis pueden ser atribuidas a “los incendios bajo los cables de baja tensión en la zona de Cordillera que afectaron al sistema eléctrico paraguayo. Además, la línea de 500 kV de Ayolas a Villa Hayes tuvo una falla”. También mencionó el impacto de las altas temperaturas y la demanda máxima del sistema. “La inversión anual para disminuir los cortes debe estar en torno a los USD 500 millones y no sólo USD 300 millones, como ha sido en los últimos años”, explicó Sosa. En la misma línea, la vocera del Gobierno de Paraguay, Paula Carro, señaló las conexiones ilegales y la criptominería como uno de los principales causantes de la sobrecarga del sistema.